Este cuento es una aventura increíble de 4 niños en sus vacaciones de verano…
Como todos los años en agosto, Amanda y Diego iban a pasar 15 días al pueblo de sus abuelos.
Era un pueblecito en Ávila, donde se lo pasaban siempre genial. Ayudaban a la abuela con el jardín, daban increíbles paseos para coger moras con el abuelo y desde hacía dos veranos, los nietos de Marisa, su vecina también pasaban unos días por allí.
(…)
Y colorín colorado, este cuento encantado se ha acabado.